

La filosofía es una asignatura compleja que requiere de concentración y de tiempo para entender bien los textos de los autores más típicos que suelen estudiarse. No sirve de nada memorizar ideas si no se entiende bien lo que se está leyendo.
Técnicas de estudio para un examen de Filosofía
Cuando te enfrentes a un examen de esta materia te proponemos que contemples las siguientes técnicas de estudio y escojas la que mejor se adapte a tu forma de aprendizaje:


-Tenemos que perder el miedo a leer los textos de los autores más importantes de la historia de la filosofía. La lectura no puede hacerse de forma aislada, ya que si se hace así probablemente no se entienda demasiado bien el pensamiento de los filósofos que estamos estudiando. Debemos de tener siempre en cuenta el contexto social, histórico y filósofico en el que se escriben los textos y las obras para que podamos entender mejor sus ideas.
-La concentración a la hora de estudiar es fundamental ya que se trata de una asignatura en la que el razonamiento es la clave. Te puede ayudar estudiar a la misma hora y en un lugar específico.
-Trabajo diario. Es una asignatura que debemos de interiorizar poco a poco y entender bien para que no tengamos problemas a la hora de realizar el examen de filosofía. Por tanto, es fundamental llevar la materia al día y preguntar todas las dudas que tengas a tu profesor. Hay que tener en cuenta que es una asignatura que genera muchas dudas y preguntas, y recuerda que no deben quedarse sin resolver.
-Hacer debates. Es una asignatura que invita a pensar y para su estudio puede servirte de ayuda para reunirte con algunos de tus compañeros y debatir acerca de los textos de los autores que estáis estudiando. En los debates es importante argumentar las ideas y poner ejemplos, ya que de esta manera las teorías abstractas de la filosofía se nos hacen más prácticas y reales.


-Una vez que entiendas los conceptos, como en cualquier otra asignatura, tendrás que retener en tu memoria las ideas fundamentales de cada autor y estudiar para retener el conocimiento.
-Realizar lecturas reflexivas. Para preparar un examen no basta con estudiar a los diferentes filósofos, es fundamental también leer sus obras y sus textos para comprender mucho mejor el proceso de pensamiento que sigue el autor. Para ello, es importante que relaciones ideas y hagas lecturas con frecuencia.
-A la hora de hacer el examen debes de tener en cuenta que en muchas ocasiones se trata de hacer un comentario de texto acerca de uno de los autores que has estudiado. No se trata de decir cuál es la teoría en pocas frases, sino explicarla con argumentos y relacionando ideas que justifiquen el texto del autor y el funcionamiento de sus conclusiones. Por este motivo es indispensable hacer lecturas de las obras de los filósofos a lo largo del curso.
-El alumno tiene que saber interpretar la intención del autor con dicho texto y plasmarlo en el examen con explicaciones apropiadas. Como ayuda en tu estudio, te puede servir hacer esquemas de cada autor en los que se reunan sus características principales ya que de esta forma lo estaremos estructurando mejor en nuestra mente.


Del mismo modo, es recomendable anotar nuestros pensamientos y reflexiones acerca de de los textos que estamos leyendo. Esto sirve para reforzar nuestro estudio y aclarar nuestra mente.
muy bueno
bien