Es fundamental que tengas en cuenta los sentimientos del niño tímido y conocer su opinión acerca de las actividades en las que quiere participar. Siempre es importante averiguar cuáles son sus gustos y según sean sus respuestas es momento de buscar las actividades adecuadas.
Por ejemplo, si le encanta el fútbol, es conveniente que le busques un equipo al que pueda jugar con cierta frecuencia, ya que además hará nuevas amistades y aprenderá valores importantes como el esfuerzo o la constancia.
Educación y actividades para niños tímidos
Por tanto, los deportes de equipo (fútbol, baloncesto o voleibol, entre otros) son actividades recomendadas para niños tímidos, vergonzosos o introvertidos. Además de ayudarles a vencer sus miedos e inseguridades, el deporte de equipo ayuda a mejorar la velocidad, la capacidad de reflejos, la agilidad, la concentración. Igualmente, fomentan el trabajo en equipo, la tolerancia, el respeto de las reglas del juego y al adversario.
Las artes marciales son también indicadas para los niños tímidos. Les aporta seguridad y se pueden comenzar a practicar a partir de los 5 años. Gracias a las artes marciales, la autoconfianza, el autocontrol y el correcto desarrollo motor se ejercitan. Del mismo modo, mejora la coordinación, la resistencia, la fuerza, la velocidad y la flexibilidad.
Hay otro tipo de actividades que se llevan a cabo en un entorno natural altamente recomendadas para niños tímidos. Estar en contacto con la naturaleza, realizar excursiones en el campo, conocer acerca de la flora y de la fauna de un entorno natural son propicias para aquellos niños introvertidos, ya que además les suele gustar, y es una buena manera de que aprendan a conocer el medio ambiente y a relacionarse con otros compañeros.


Por otro lado podemos mencionar que las actividades artísticas también son indicadas para los niños tímidos o inseguros. Todas ellas favorecen la creatividad, la imaginación, el gusto por la estética y el espíritu de superación. Son maneras en la que los niños pueden plasmar y exteriorizar gran parte de su mundo interior, y una forma de sentirse mejor consigo mismos, lo cual les dotará de una mayor seguridad.
La danza o el ballet permite conocer mejor el propio cuerpo de los niños, de forma que aporta flexibilidad y agilidad. En este tipo de actividades se desarrolla la expresión corporal, que puede ser de mucha ayuda para el niño tímido. También favorece la sociabilidad con otros compañeros, la concentración y la memoria.
La literatura suele apasionar a muchos niños que, al ser tímidos, prefieren leer durante más tiempo que participar en actividades sociales en muchos casos. Tiene grandes ventajas. La más importante es que estimula la mente, fomenta el interés por la lectura, y puede servir para que los niños aprendan de otras historias retratadas en los libros y puedan relacionarse mejor gracias a los ejemplos que aparecen en muchas obras literarias.


Las artes plásticas (pintura, artesanía o fotografía, entre otras) estimulan la creatividad de los niños y potencian su destreza visual y manual. Son actividades indicadas para niños introvertidos, ya que es posible que ganen más confianza consigo mismos al realizar este tipo de tareas.
Otro tipo de actividades educativas que pueden ser útiles para los niños tímidos son aquellas en las que participan con otros niños, como por ejemplo los juegos de mesa. Algunos de preguntas y respuestas sobre cultura son educativos y además se está potenciando la comunicación con otros niños.