

Con la entrada del plan Bolonia, que en los próximos cursos terminará de implantarse en España, el panorama educativo universitario habrá dado un giro para adaptarse a las necesidades europeas (al menos, en teoría debería ser así). Con ello, los estudios se están adaptando al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
De este modo, el máster parece ser una salida necesaria, puesto que el grado se quedaría corto ante la creciente competitividad que ya hay en el mercado laboral, unida a la escasa contratación empresarial.
Por tanto, hacer un postgrado es una buena opción. Mediante un postgrado obtienes especialización en un tema tras haber acabado tu carrera, por lo que profundizarás en conocimientos y estarás más preparado para entrar en el mercado laboral, sobre todo por que tras la implantación del grado -en el que las carreras pasan a durar todas cuatro años (240 créditos ECTS*: 60 cada curso)- el estudiante no sale demasiado preparado, y necesitaría adornar su currículum con un postgrado. Hacer un máster y un doctorado son una opción que potenciará tu competitividad en una sociedad saturada.
Con ello, la organización de la enseñanza universitaria oficial en España ha cambiado, y tras la implantación del EEES está organizada en tres ciclos: Grado (240 ECTS), Máster (60-120 ECTS) y Doctorado. Si quieres más información sobre ello, pincha en este enlace del Ministerio de Educación.
En la actualidad, todas las universidad ofrecen una variada oferta de estudios de postgrado.
*Un crédito ECTS supone entre 25 y 30 horas y refleja los resultados del aprendizaje y el volumen de trabajo realizado