

Saber gestionar la documentación interna y externa de una empresa se convierte en algo fundamental para el negocio, sobre todo con la presencia cada vez más fuerte de Internet y la auténtica revolución que han supuesto las redes sociales.
Similar a lo que por aquí conocemos como licenciado en Documentación, un gestor de documentos o record manager sin excesiva experiencia puede llegar a cobrar entre 30.000 y 40.000 euros, sin embargo, el sueldo se podría llegar a duplicar si hablamos de un profesional más experimentado y con mayores responsabilidades.
Entre sus competencias podríamos destacar la creación de datos y documentos, además del archivo de los mismos, la recuperación y en su caso la eliminación de la información no deseada. Una correcta gestión precisa de que en el proceso de creación de la documentación se garantice la elaboración de sólo los documentos necesarios y que estos estén redactados de tal forma que puedan ser comprendidos a la perfección evitando posibles interpretaciones.
Además, los profesionales dedicados a la gestión de la documentación deben asegurar el acceso controlado de los datos, así como la legalidad, integridad y autenticidad de todos y cada uno de los documentos que la empresa emita. Por último, y en el caso de tener que eliminar documentación, es necesario que ésta cuente con una fecha de caducidad y que la destrucción se realice de forma segura y definitiva.
En nuestro país ya se trabaja en la creación de una norma de calidad que dé prestigio a esta profesión, regule su funcionamiento y evite el intrusismo de profesionales poco cualificados.