

La explotación infantil está relacionada con las condiciones de subdesarrollo de los países, la pobreza económica, la deformación de los valores, la desfragmentación de la familia y la escasa educación.La diferencia entre ambos radica en que el trabajo fuera de la estructura familiar es por lo general remunerado míseramente, y en muchas ocasiones llega a ser esclavitud. Se trata de una forma de explotación, que priva a los niños de su infancia, y que es perjudicial para el bienestar físico, mental y/o moral del niño. En el rango de los cinco a los diecisiete años, uno de cada seis niños de todo el mundo es esclavo, de alguna forma.
Una sucesión de factores hace que estos niños tengan que trabajar en muy malas circunstancias y también que tengan que realizar tareas que muchos mayores se niegan a hacer. Una de las causas es la pobreza: los niños tienen que trabajar para ayudar a los ingresos familiares. El grave problema del trabajo infantil es que la mayoría de las veces lo obliga a abandonar la escuela y otras le exige combinar el estudio con un trabajo pesado y que insume mucho tiempo.
Cerca de ciento treinta millones de niños no concurren a la escuela regularmente porque muchos de ellos trabajan. Y de esos ciento treinta, hay ciento cuatro millones que, directamente, no van a la escuela primaria (el 56 % son niñas). Estas cifras están sacadas de países que se encuentran en Asia.
Las cifras con respecto al trabajo infantil son alarmantes y pertenecen tanto a países desarrollados como a los que están en vías de desarrollo. En todo el mundo, existen alrededor de dos mil doscientos millones de menores de dieciocho años que sumados a los jóvenes llegan aproximadamente a la mitad de la población mundial.
De todos los niños explotados del mundo, el 10% viven en países desarrollados y el resto, el 90%, viven en países subdesarrollados. De esta manera, existe una relación directa entre la pobreza y la explotación infantil. Además, este problema está ligado con la explotación sexual, forma mucho más triste y dañina.
Si la situación del trabajo infantil continúa arrojando cifras desalentadoras en los años venideros uno de los países con más de la mitad de los niños sin escolarización será África.
Es algo repulsivo de que los niños trabajen, en vez de que se pongan a estudiar o aprender cosas nuevas, dicha explicación es que son muy menores para impartirles trabajos esforzantes para su edad.