

Cada día nos damos más cuenta de la importancia de la educación que reciben nuestros hijos, desde sus primeros años de vida. No sólo para su futuro bienestar psicológico, sino porque de ello depende en gran medida el devenir de nuestras sociedades.
Sabiendo que no es tarea fácil educar a un hijo, que requiere esfuerzo y atención, vamos a analizar 5 errores que no deberíamos cometer:
- Somos el espejo de nuestros menores, las actitudes y comportamientos que tengamos en nuestras vidas, van a servir de modelo para nuestro hijo. Situaciones de crispación, pérdida de los nervios, estrés, etc, etc. Sirven como un patrón a aprender por ellos, y van a responder de la misma manera ante las mismas situaciones.
- El entorno nunca debe fomentar hábitos no favorables, una casa que no tenga libros, que no se fomente la cultura y el deporte, estará diciendo a nuestros menores que realmente no le damos la importancia que requiere a esto, y puede no valorar en su correcta medida el desarrollo intelectual y una vida saludable.
- No debemos presionar a nuestros hijos, si queremos conseguir algo en particular, el camino correcto es el de la comprensión y el diálogo, sino estaremos generando una respuesta contraria a la deseada.
- La incomunicación, es de vital importancia que el niño crezca en un ambiente comunicativo, donde aprenda a expresar sus sentimientos.
- El no prestarle la atención que necesita y que se sienta sólo. Para el desarrollo de una autoestima saludable, es importante que el niño sienta el apoyo de sus padres en todo lo que hace. Es necesario que el niño sienta que su vida y lo que el realiza es significativo, para ello los padres tienen que tomar una actitud de atención hacia el niño y las cosas que hace.