

No es un fenómeno nuevo o una moda, en muchos lugares, la homeschooling es una opción legal para padres que quieren formar a sus hijos con un ambiente de enseñanza diferente al que existe en las escuelas cercanas. En muchos casos estas familias se deciden por este tipo de educación por motivos religiosos, otras por no gustarles los centros formativos que les rodean. Pero también se convierte en una alternativa válida para aquellas familias que viven en zonas rurales aisladas y deciden, por razones personales o prácticas, no llevar a los niños a la escuela.
Hay dos formas diferentes de educar en el hogar:
Educación libre
Basada en el principio de que cualquier niño puede aprender por sí mismo, y debe ser él quien descubra sus habilidades. Además, se cree que la integración en la sociedad se hace de forma mucho más natural, viviendo en ella, que recluido en el aula de un colegio.
En este caso, los niños carecen de cualquier metodología de enseñanza y/o aprendizaje y los padres solamente tratan de integrar a los niños en el mayor número posible de actividades cotidianas, laborales, de ocio, deportivas, etc.
Educación organizada
Llevar el colegio a casa. Sus seguidores toman la planificación educativa de escuelas y colegios por ser la más adecuada para ser enseñada y aprendida por los niños. De esta forma, los padres actúan como intermediarios entre la escuela y sus hijos. Siendo ellos quienes los guían en todo el proceso educativo y de aprendizaje, pudiendo incluso poner exámenes para evaluar el proceso.
La inmensa mayoría de las familias que han optado por este tipo de educación en sus casas eligen un procedimiento intermedio, mezclan la educación libre con algunas de las pautas que se establecen en los colegios.
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